Queridos amigos ladrones, deciros que he pasado un buen rato en el blog esta tarde viendo vuestros maravillosos cuadernos y como no recordaba qué fue lo último que os conté, me he buscado también para ver por donde me había quedado, je,je... Madre mía, desde mi último día con 49 que no os había enseñado nada. Siempre me pasa que cuando llevo un tiempo sin publicar, no sé por donde empezar.
Bueno, deciros que ya tengo 50 y que después de una fiesta sorpresa que me organizaron en casa y que me hizo reír y llorar como los emoticonos del whatsapp, la vida desde aquí parece que se ve más serena.
Al día siguiente de cumplir los mencionado 50, volví a viajar a Norberg (Suecia) para dar un taller a los niños de allí en una escuela improvisada para la ocasión que organizamos justo en frente de la galería donde estuve exponiendo el verano pasado.
Bueno, deciros que ya tengo 50 y que después de una fiesta sorpresa que me organizaron en casa y que me hizo reír y llorar como los emoticonos del whatsapp, la vida desde aquí parece que se ve más serena.
Al día siguiente de cumplir los mencionado 50, volví a viajar a Norberg (Suecia) para dar un taller a los niños de allí en una escuela improvisada para la ocasión que organizamos justo en frente de la galería donde estuve exponiendo el verano pasado.
Como cartel, utilizaron la imagen de uno de los dibujos que realicé el año pasado en la galería justo el día del solsticio de verano sueco. Un día muy importante para ellos donde las chicas decoran sus cabellos con flores.
En el curso estuve trabajando con ellos sobre dos personalidades que me gustan mucho porque a partir del sufrimiento hicieron algo bonito para el mundo: Frida Kalho y Nelson Mandela, al que también hemos hecho un homenaje estos días con motivo de su centenario.
Para que se inspiraran hice unos dibujos ( uno de Nelson y otro de Frida) y también saqué libros de la biblioteca del pueblo. El segundo día del taller, me hizo mucha gracia que la niña más pequeña, Rebecka, trajo de casa un libro de Frida, ilustrado por ana juan, y justo ese día, mientras esperábamos a su padre, le hice el único dibujo sobre cuaderno que me dio tiempo a hacer durante el viaje.
También hice con ellos este mural...para realizarlo les pedí dibujar en un cuaderno las flores del jardín donde estábamos, por lo que está inspirado en su naturaleza.
Alguien pasó llevando cosas y dejó un momentito esos dos gamberos al lado del mural y me pareció que le quedaban de maravilla. Las flores las había puesto sobre otra mesa la galerista. Sólo faltaba coger la cámara y darle al click.
El último día, hice una exposición con todos los trabajos e invité a los familiares. De esta manera ,conocí a la mamá de Rebecka que me comentó que su madre vivía en San Miguel de Salinas, un pueblo situado a una hora de Elche.
Cuando volví a Elche, un día la abuela de Rebecka vino a verme y me encargó un cuadro. En su móvil tenía el dibujo de Frida que su nieta había hecho en mi taller. Me pareció muy significativo y mágico todo.
El amor que es como las olas del mar que viene y va...
Besos para todos. Espero que estéis disfrutando mucho de vuestro verano.
Dolça
Admirador de tu arte, de tus actividades, de tu ir y venir...
ResponderEliminarhumildemente declaro... que el que más me gusta es el dibujo de
Frida, hecho por Rebecka, MUY BUENO...!!!
Muchas gracias Fernando. Sí, la Frida de Rebecka es preciosa y a mí me recuerda el maravilloso ambiente que se creo con los 20 niños y niñas que vinieron. Tienen los suecos una cosa muy integrada en su cultura que es el Fike pausse. Una pausa a media mañana o media tarde, con bollitos de canela, galletas y zumos que en esta ocasión estaban tan buenos que los niños pedían empezar la clase con ese "Fika pausse".
EliminarAnte todo, felicidades por esos magníficos 50 que llevas con orgullo y mucha elegancia! Ye te felicité en su momento... pero qué más da, no sobra ninguna felicitación.
ResponderEliminarTambién estoy orgulloso de que hayas hecho una bella página en este blog, a pesar de lo desentrenada que dices que estabas. No has defraudado, sino todo lo contrario. Dulce, como todas, son preciosas y exultantes de alegría regalando felicidad por todas partes!! No fallas nunca y... mejor dicho, cada vez te superas.
Qué historias tan hermosas nos cuentas siempre. Lo de Rebecka es increíble!
Venga, tranquila, que los que te conocemos, sabemos que no te sobra tiempo y haces tus páginas cuando puedas. Sabemos que estás ahí y que quieres mucho a los ladrones y que nunca los olvidas. Disfruta y diviértete, que a tus cincuenta eres una chiquilla que regala amor por todas partes.
Un beso de los gordos.
Muchas gracias capitán ^_^ Acabo de hacer un cambio ya que me parecía que esa foto a contraluz con libros quedaba un poco oscura, la he cambiado por otras en los que mis dibujos para regalar inspiración se ven un poquito mejor y otra del libro que aquel día trajo Rebecka. Me gustó mucho que la ilustradora de aquel libro fuera española.
EliminarClaro que me tenéis aquí siempre, unas veces más activa y otras menos, pero cada día en mi corazón. Besos de vuelta para ti.
Felicidades, querida Dolça...! pero si eres una niña, ay! los cincuenta quién los pillara...! Diafruta de la vida todo lo que puedas y sigue dándonos alegría en esta cueva con tus dibujos y relatos, gracias por compartir tantos momentos felices con tus actividades culturales y didácticas que los más jóvenes te agradecerán siempre; Frida y Mandela estarán contentos allá dónde estén...
ResponderEliminarBiquiños y tironcillo de orejas.
Muchas gracias Carmen. Intento disfrutar todo lo que puedo. Ahora que ya he vivido la mitad y sé mucho más( aunque a veces tenga la sensación de no saber nada)espero vivirla desde esta otra perspectiva donde solo tienen verdaderamente importancia esas pequeñas cosas que iluminan el alma.
EliminarEspero que los niños y niñas que pasan por mis talleres, les quede una pinceladita en su memoria de aquellas cosas que pintábamos y comentábamos en clase.
Un abraciño para ti ^_*
querida Dolça, muchas felicidades! me encanta el mural, y todo el ambiente y las historias que lo rodean. Seguro que los niños no lo olvidarán nunca , Un abrazo
ResponderEliminarMuchas gracias Susana. Suecia en verano es especial, sobre todo en pueblos con Norberg. Los niños que conocí son muy afortunados de pasar sus veranos allí. Muchos de ellos vivían en Estocolmo y acuden allí en verano a veranear en compañía de sus abuelos.Lo pasamos muy bien. Yo tampoco les voy a olvidar.
EliminarSe nota que disfrutas con los niños y la docencia. Y también se nota lo que ellos disfrutan contigo. ¡Para muestra esa Frida de Rebecka!
ResponderEliminarUn fuerte abrazo, Dolça.
Hola Oñera,
EliminarSí la verdad es que disfruto mucho y ellos que son muy listos creo que lo notan. Este taller fue muy completo porque incluso les enseñé un poquito de español, je,je. Me gusta que además de pintar, cada día conozcan algo que no sabían.
Un fuerte abrazo de vuelta para ti.