Para empezar, os presento el retrato que me hizo Isaak, un niño de 6 años, terriblemente espabilao, en mi cuaderno antiguo de actas de la sociedad. Me obligó a quedarme quieto y callado mientras me retrataba, mirándome fijamente a los ojos, me pidió que abriese la boca y examinó detenidamente todos los dientes y cara, mientras dibujaba. Fue nombrando los defectos que hallaba...y al rato me dijo: Toma, ese eres tú!
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Ahora expongo algunos de los últimos que dibujo en papel Kraft durante mis desplazamientos en tren. Estas dos niñas, no tan niñas, se sentaron en el suelo, haciendo sitio con toda su jeta (el tren estaba muy lleno) y se pusieron a trabajar tranquilamente, mientras el tren marchaba, ignorando al resto de los mortales que contemplábamos la escena con cara de perplejidad. Incluso en algún momento preguntaron que, en qué estación estaban. Bajaron y se fueron. Claro, las dibujé!
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El mismo día, por la mañana se sentó delante mío, este personaje que parecía un Papa Noel y lo dibujé, a pesar de que su mujer, sentada frente a él, me miraba con cara de pocos amigos, pero disimulé todo lo que pude y no pasó a mayores.
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Finalmente, otro día, este joven, en el trayecto a Terrassa, también se sentó en el suelo, pero sin molestar a nadie y estuvo todo el trayecto leyendo y escribiendo.
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Este es mi entretenimiento mientras me desplazo de un lugar a otro.
Este niño promete, Joshemari mío. El retrato es buenísimo para su edad. Yo, tras lo del examen de tus dientes, pienso tamibién que pueda ir para médico (ya sabes, por aquello de abra usted la boca, diga aaaaa...).
ResponderEliminarDe tus dibus quizá el que más me gusta es el del sr. aspirante a papa noel, esos resaltes en blanco en contraste con el papel tonner y la tinta dan al retrato un efecto muy atractivo. Los dos primeros también me gustan, tienen, a través de esos toques de color, una pátina añeja y muy dulce.
Abrazotes gordotes, barbaplata
Posdata: cuidado con el próximo posado para el tal Isaac, que este lo mismo te retrata que te opera de apendicitis vía oral, jiiiii...
Joer si promete! Es un niño muy raro pero de una gran inteligencia, observador como pocos a esa edad. Se fija en todos los detalles y los explica. He hablado varias veces con su madre y me lo ha confirmado. Es muy serio. Pocas veces sonríe. Y me hace grandes saludos cuando lo veo, deja todo lo que hace para que me entere de que me ha visto. Algún día que se acerque cuando dibujo, le pediré que vuelva a hacerme otro retrato. A ver cómo me ve ahora! Me lo ha prometido!
EliminarComo puedes ver sigo con mis dibujos indiscretos en los trenes. Es muy divertido. El color, le suelo añadir a veces, allí mismo o en otro lugar con plumas de distintos colores de tintas disueltas con agua.
Un fuerte abrazo Marga mía y me alegro de tu vuelta a este penal.
Tu galería de retratos es impagable.
ResponderEliminarAbrazo
Es la forma de entretenerme en esos viajes en tren. Ya no bajo en coche, más que a la población más cercana y desde allí recurro a todo tipo de transportes públicos. Se me hace largo, pero con el dibujo o alguna lectura... casi ni me entero.
EliminarGracias Cake. Otro fuerte abrazo.
vaya con el niño.....no se cortó ni un pelo. Tus retratos, bien bonitos. Venga que esto se anima. Un abrazo.
ResponderEliminarEs rarillo... sí, pero me quiere mucho. Me habla siempre del dibujo que me hizo y lo hace como si hubiese sido la gran obra de su vida. No se corta ni un pelo! Algún día le pediré que vuelva a hacerme otro!
EliminarGracias Susana por animar este cotarro. Un fuerte abrazo.
Esos retratos tuyos sin contar los dientes a los retratados ni nada... No sé Joshemari. ¡La próxima vez a abrir la boca todos los compañeros de vagón!
ResponderEliminarUn abrazo, Joshemari.
Ja, ja, ja! Esto sí que sería interesante. En vez de durmiendo o manipulando el móvil, todos a abrir la boca que yo los dibuje!! Si no recibo algún mordisco...
EliminarParece que esto se anima y lo pasaremos mejor!
Un fuerte abrazo.
Tas mu guapo.
ResponderEliminarMu favoresío!
EliminarEl retrato del niño denota una fuerte personalidad. Tus trabajos en el transporte son de una gran espontaneidad y calidad, y denotan el placer que te proporciona la creación artística.
ResponderEliminarGracias CID. Es cierto, el niño tiene una enorme personalidad. Me gusta dibujar en mis trayectos en tren. Si salen artísticos o no ya depende de si se mueve más o menos el tren y que esté cómodo e inspirado y de que la persona que tengo delante me parezca interesante.
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