jueves, 5 de julio de 2018

Ortiga




La ortiga
Los tejidos fabricados con  la ortiga son suaves, brillantes y agradables al tacto, se blanquean bien y aguanta la humedad, pero duran poco.
Aunque no son muy conocidas sus propiedades, es una de las plantas que más aplicaciones medicinales posee, es diurética, digestiva, hepática, laxante y galactogena (que aumentan la producción de leche a las madres lactantes). Últimamente  se ha descubierto que la utilización de la raíz en enfermedades de la próstata impide. su crecimiento y formación de enzimas, aumentando el flujo y volumen de orina, disminuyendo la cantidad de orina residual.
Se ha consumido en ensaladas, rica en vitamina C, también como verdura preparándose igual que las espinacas, en forma de puré  y también en tortilla.
En Roma utilizaban la urticación, que consiste en  golpear con una rama de ortigas, consiguiendo así cierta estimulación sexual, por aumentar el calor corporal y excitar  la piel, lo que solían hacer antes del acto sexual.


5 comentarios:

  1. Yo de ti, lo que hacían los romanos, no lo haría, por si acaso.
    Con la faena que conlleva, a cierta edad, solo faltaría RASCARSE !!!
    Tu ilustración, y tu documentación, de gran mérito, y contenido.
    Te felicito.

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  2. Cuando veo ortigas... lo primero que se me ocurre y digo es: lagarto, lagarto!!! Siempre llegaba a casa marcada por ellas!
    En mi pueblo había cantidad y para lo que se usaba, era para evitar las pulgas, mosquitos y otros bichos. Se colocaban matojos en las habitaciones y debajo la cama y ésto se ve que las ahuyentaban. Claro, que cuando era pequeño, viví en un caserío del año 1650, muy grande, de treinta y tantas habitaciones, la mayoría con chimenea, desván en el altillo donde se guardaban los quesos y trastos viejos, tres salones de piano... etc etc... Había pulgas, arañas y hasta alguna culebra debajo de esos suelos de madera Pues sí, había pulgas!!! Teníamos corral con vacas, caballos, ovejas, conejos, gallinas y cerdos... Y... qué bien se vivía en el campo!!
    Bueno, José, un excelente dibujo y buena explicación.
    Un abrazo.

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  3. Estás hecho un Ortiga y Gasset de las plantas, un Dioscórides de las matas y los arbustos. Me gusta el dibujo, tan delicado y descriptivo como corresponde al género (al dibujo botánico me refiero, que en otros berenjenales no me quiero meter). También el texto, aunque no pienso seguir tus prescripciones, especialmente la de fustigarme con ortigas los lomos aunque sea para tan noble fin. Ni las demás tampoco que cuando las ortigas lleguen al estado de tortilla las manos deban andar escocidas. No sé si será de aplicación al caso decir que te andas por las ramas, pero nunca está de más saber estas cosas.
    Un abrazo

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  4. Por donde ando abundan las ortigas y las he comido en tortilla con sabor sorprendente (se asemeja a la espinaca). Creo que en Francia utilizan su infusión los agricultores.
    Interesante viaje al que nos invitas con tus perfectos dibujos.

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  5. Un pozo de arte y de ciencia es lo que eres. Con respecto a las ortigas, se comentaba que las podías tocar, si al mismo tiempo respirabas muy profundamente.

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